miércoles, 18 de marzo de 2009

¿Quién es verdaderamente creativo?

¿Yo creativo?
¿Tú creativo?
¿El creativo?
¿Nosotros creativos?
¿Vosotros creativeisnnn?
¿Ellos creativos?

Creo que es una pregunta por demás cansadora a esta altura, y ya no me la banco. Si somos creativos o no, depende de cada uno y no de lo que estudiemos. Eso me quedó clarísimo.

“Confesiones de Creativos” estuvo bueno. Sí. Tuvo de todo eso que siempre termina siendo un evento como este: charlas simpáticas, entretenidas, tiroteos a la publicidad, calor, mucha gente y momentos en que no quisieras estar ahí.
Por suerte dos amigas y yo conseguimos sentarnos en segunda fila, por esas cosas que inexplicablemente te pasan en la vida. De atrás se sentía que había mucha gente tratando de escuchar, pero se ve que la acústica de la capilla era muy mala. Y claro… ¿no dicen que a Dios tenemos que escucharlo cada uno en su corazón? ¡¡Puff!!
Empezó “Confesiones…” con Tony Curtino mostrándonos un poco de su vida, de cómo se las arregló para sobrevivir creativamente. Su confesión fue aceptar que la creatividad salvó su vida. Interesante. Más si en mi caso sé, afirmo y confieso si es necesario, que no podría hacer otra cosa sino es jugar con la creatividad.
Siguieron varios. Alguien presentó un video, que me pareció bastante redundante y sólo pude rescatar una última frase que decía: “La creatividad es hacer el mundo un poco mejor de lo que lo encontramos”. Creo que tiene mucho sentido.

Estas son algunas de las notas que escribí en mi celular mientras jugaba el papel de un sacerdote que escuchaba confesiones de algunos pecadores:

José Playo, escritor, comunicador social y boludo. (Así se hace nombrar él en uno de sus relatos). Gracioso. ¿A quien no le gusta que le mientan José?

Seamos “salchidalmatas” mitad chongos mitad chetos (o algo así). No entendí demasiado lo que quiso decirnos.

Son más de las diez de la noche en la capilla. Uno sube con lentes a dar su charla. Muy salame. “Vomitemos flores, vayámonos a la mierda”. ¡UPA! Esto me mareó un poco.

Excelente analogía con unos globos. Del globito vivimos todos, jaja.

Mujer conferencista pareció tener un orgasmo metafísico en el escenario.

Tengan tanto talento como puedan.

La creatividad puede ser muy perversa. Orestes Lucero, sin palabras.

Mierda, qué calor hace.

Ex publicitario denuncia a los falsos creativos. ¡Qué huevos!

Artistas plásticas olvidaron preparar lo que iban a decir.

¿Afuera sirven fernet gratis?

Psicólogo habla del paso de la heterosexualidad a la homosexualidad.

¿Bellomo estará atrás?

En fin. Estuvo muy bueno, me gustó. Acepto que siempre desde el público se ve lo mejor y lo peor. Uno critica mucho pero los que están ahí arriba no somos nosotros. Lo único negativo que puedo decir es que de tantas acepciones tan variadas del concepto de creatividad, se me hizo una ensalada rusa en la cabeza.
Creo seguir firme en lo que pienso, más allá de la carrera y la profesión y todo eso.
Sino fuera creativa, me aburriría tanto de los días, las mañanas, la comida y los horarios.

Soy feliz, y si eso se lo debo a esa chispita creativa… ¡BENDITA SEA ELLA!

martes, 10 de marzo de 2009


¡¡Quiero ser José Playo por un día!!

Me acordaba ayer de ese programa bastante pedorro en donde ciertos “fanáticos” jugaban a ser sus ídolos por un día.
No quiero decir que José Playo sea mi ídolo, pero me hice fan de sus relatos. Hoy me meto en el juego y trato de teletransportarme a su cabeza, a escribir como él lo haría para contar algo que seguramente a él también le rompe las pelotas (literalmente en mi caso, porque decir “me rompe los ovarios” no me suena para nada simpático).

En casa tenemos a Bruno, el perro de la familia, no el mío. No nos llevamos bien desde un principio. Me meaba la cama, me arrancaba justo Mi ropa de la soga, la cagaba a mordiscazos y la enterraba en el fondo. Debe haber madurado porque hace unos meses que no lo hace. Igualmente me quedó una pica terrible.
El problema es que no soporto su vida de vago, que le den la comidita siempre a horario, que lo bañen, lo perfumen y encima junten sus soretes con “servilletas de papel con dibujitos”. ¡¡Dejame de joder!! Que venga él y me haga de comer todos los días cuando vengo de la facu chorreando transpiración y cansancio. Que venga él a bañarme y a pasarme la esponja y de paso me haga unos masajes. ¡NO! Porque no sirve para nada, ni siquiera como cortador de uñas. Siempre que me dicen “pobre Juan, ahora tiene una vida de perros” yo grito ¡¡QUE SUERTE HIJO DE PU... !!
Otra cosa que me pone como loca es que todos traten de hablar por el perro. Pobre, él no tuvo la suerte de poder decirme toda la sartada de cosas que seguro tiene ganas y encima tiene que bancarse que hablen por él. Lo peor de todo es que le ponen una voz de pito, como si dieran por hecho que ellos hablan así. Mirá si tienen la voz del viejo que dice “espectacular” en el programa de Petti o la voz de la Nana Fine sin el doblaje al español.
Puedo convivir con los perros, más si los que me rodean sí los aman, pero no me pidan que haga lo mismo. Igualmente creo que el día que se valla de casa, paradójicamente, lo voy a extrañar.